Complexity Gaming, comúnmente conocida como Complexity o COL, es una franquicia de deportes electrónicos estadounidense con sede en Frisco, Texas. Establecida en 2003 por Jason Lake, la franquicia ha crecido hasta convertirse en una de las organizaciones más prominentes y duraderas en el mundo de los deportes electrónicos. Compite en varios juegos, incluyendo Counter-Strike 2, Apex Legends, FIFA, Fortnite, Hearthstone, Madden, Magic: The Gathering Arena, Rocket League y Valorant. La franquicia opera desde el Legion by Lenovo Esports Center, una instalación de entrenamiento de última generación ubicada en The Star, y tiene una rica historia marcada por logros significativos y notables cambios de propiedad.

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Fundación y Primeros Años (1998–2007)

Complexity Gaming fue iniciada por Jason Lake como un clan de Counter-Strike: 1.3 en 1998. En 2003, Lake convirtió el clan en un equipo profesional al pagar a dos jugadores de su propio bolsillo, estableciendo formalmente Complexity Gaming. Inicialmente, Lake era tanto jugador como gerente, pero en 2004, se trasladó a un rol administrativo y de coaching para administrar mejor el equipo.

Durante estos años formativos, Lake, quien era abogado de bienes raíces con sede en Atlanta, Georgia, financió los salarios del equipo y los gastos de viaje de su propio bolsillo. Para 2007, había invertido más de $400,000 en el equipo. Complexity Gaming rápidamente se convirtió en una fuerza competitiva, logrando victorias significativas como los Intel Summer Championships de 2006 y el DirecTV Championship Gaming Invitational. Estos éxitos llevaron a Lake a vender el equipo a DirecTV por $100,000, y el equipo fue rebautizado como Los Angeles Complexity, uniéndose a la Championship Gaming Series.

A lo largo de la década de 2000, numerosos miembros del personal contribuyeron a elevar el perfil de la organización. Los miembros notables incluían a Kyle "kuniva" Shellhouse, Jordan "p4t" Taylor, Rick "digx" Martinez y Shane "exica" Bailey, quienes desempeñaron roles clave en la creación de contenido, reclutamiento, gráficos y animación.

Crecimiento Continuo y Expansión (2008–2016)

Después de que la Championship Gaming Series se disolviera en 2008, Complexity continuó operando, formando equipos en juegos como Counter-Strike: Global Offensive, Call of Duty: Black Ops II y Dota 2. La organización se convirtió en miembro de los G7 Teams, un grupo que promovía los deportes electrónicos a finales de la década de 2000. Aunque Complexity fue temporalmente removida del grupo, fue readmitida en 2009.

Durante este período, Complexity logró posiciones notables en varias competiciones, incluyendo un 3er lugar en Dreamhack Winter 2009 y 2º lugar en el IEM IV American Championship. También incursionaron en Quake Live, fichando a jugadores como Sander "Vo0" Kaasjager y Brian "dkt" Flanders, y compitieron en juegos como Madden NFL 2010, Team Fortress 2 y FIFA 10.

En 2013, Complexity ganó el campeonato de Call of Duty: Black Ops II en ESWC 2013. Sin embargo, en 2014, vendieron su equipo de Call of Duty a Evil Geniuses. En 2015, Complexity adquirió el equipo de Heroes of the Storm Barrel Boys, con una lista que incluía a Stafford "McIntyre" McIntyre, Alexei "Blinks" Bazhenov, Drew "Trummel" Trummel, Aaron "Erho" Kappes y Edward "TigerJK" Hong.

El equipo de Dota 2 de Complexity se calificó para The International 2015 a través del torneo de clasificación regional, a pesar de no recibir una invitación directa. Este equipo estaba basado en una casa de juegos cerca de Fort Lauderdale, Florida, mostrando el compromiso de Complexity de proporcionar instalaciones de primer nivel para sus jugadores.

Venta a Jerry Jones y John Goff (2017–2024)

En 2017, Complexity Gaming experimentó un cambio significativo de propiedad cuando el propietario de los Dallas Cowboys, Jerry Jones, y el inversionista inmobiliario John Goff compraron la organización. Esta adquisición marcó una nueva era para Complexity, ya que se trasladó a Frisco, Texas, e integró en The Star, la sede mundial de los Dallas Cowboys. Jason Lake permaneció como CEO del equipo, mientras que el cofundador Jason Bass vendió su participación en la organización.

Bajo la nueva propiedad, Complexity Gaming vio inversiones sustanciales y mejoras en infraestructura. En 2019, GameStop patrocinó la construcción de una nueva sede e instalación de entrenamiento, el GameStop Performance Center, dentro del complejo The Star. Esta instalación de última generación sirvió como un centro para las operaciones y el entrenamiento del equipo, solidificando aún más la presencia de Complexity en la industria de los deportes electrónicos.

Durante este período, Complexity amplió su alcance competitivo, añadiendo un equipo de Rocket League en 2018 y colaborando con el diseñador Luke Millanta en 2019 para crear una colección de skins de armas de Counter-Strike: Global Offensive con la marca Complexity. Estas iniciativas ayudaron a aumentar la visibilidad de la franquicia y el compromiso con la comunidad de jugadores.

Readquisición por Jason Lake (2024–presente)

En 2024, Complexity Gaming experimentó otro cambio de propiedad cuando Jason Lake readquirió la organización por $10.36 millones de GameSquare Holdings. Esta readquisición siguió a la fusión de GameSquare con FaZe Clan y fue parte de un movimiento estratégico para asegurar el crecimiento continuo y la independencia de Complexity. El acuerdo incluyó un pago inicial de $75,000 y una nota financiada por el vendedor de aproximadamente $9.61 millones, con GameSquare con derecho al 50% de los ingresos de cualquier capital recaudado por Global Esports que exceda los $500,000.

Bajo el liderazgo renovado de Lake, Complexity Gaming se propuso construir sobre su rica historia y legado en la industria de los deportes electrónicos. Uno de los hitos significativos durante este período fue el regreso de Complexity a la escena competitiva de primer nivel con una aparición en la final en IEM Sydney 2023, marcando su primera final de nivel 1 en años. Además, aseguraron su primera victoria en un trofeo en 14 años en el ESL Challenger at DreamHack Summer 2024.

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Conclusión

El recorrido de Complexity Gaming desde su fundación en 2003 hasta su estado actual como una organización líder en deportes electrónicos es un testimonio de resiliencia, visión estratégica y compromiso con la excelencia. A lo largo de los años, la franquicia ha navegado por cambios significativos en la propiedad, ha expandido su cartera competitiva y ha invertido en instalaciones de última generación. Con Jason Lake nuevamente al timón, Complexity Gaming está preparada para continuar su legado de éxito competitivo e innovación en el mundo siempre cambiante de los deportes electrónicos. A medida que miran hacia el futuro, Complexity sigue dedicada a empujar los límites de los esports y proporcionar experiencias de primer nivel tanto para jugadores como para aficionados.